El rábano y otras verduras afines, como el daikon y el rábano, son tubérculos crujientes con un sabor fresco y picante. Crecen rápidamente y son ideales para verduras crudas, ensaladas, encurtidos o platos ligeros.
Los rábanos son hortalizas de rápido crecimiento y se pueden cosechar entre 3 y 5 semanas después de la siembra. Sembrar regularmente garantiza una cosecha continua. Ideal para jardineros profesionales que buscan una producción eficiente y fiable.
El rábano se puede sembrar durante todo el año, excepto en épocas de heladas intensas. Siembre en semillero frío a partir de febrero o directamente en la tierra de marzo a septiembre.
Siembre las semillas a 1 cm de profundidad, dejando una distancia de unos 5 cm entre ellas. Aclare las plántulas una vez que hayan brotado.
Los rábanos se espigan rápidamente con poca agua o calor excesivo. Asegúrese de mantener una humedad constante y coseche a tiempo.
La deficiencia de potasio o el exceso de nitrógeno pueden dificultar la formación de tubérculos. Proporcione una dieta equilibrada y, si es necesario, elija un terreno que no esté muy fertilizado.
Existen muchas variedades, como los rábanos rojos redondos, los rábanos blancos alargados (tipo carámbano), los rábanos de colores y los rábanos negros picantes.